Piel de mentira

Los ángeles no tienen espejos.
Quizás tú piel como la del diablo,
con escamas y pinchos
se esconda sobre tu dermis de querubín.
Tu mirada blanca, tu sonrisa calma,
es la que guarda la lanza
que dará el golpe certero
en el pecho hundido
del que no consideras caballero.
¿y qué habrá en tu interior,
para que tanta hiel derrames?
¿porqué son dianas de tus dardos
los que por amar,
pierden el dolor?
O será el color negro que derramas,
detrás de tus palabras grises,
de alegría los domingos,
de abortos inútiles cada día.
Proclamas la verdad.
¡Proclamas la Verdad!
Y sabes que tú mismo,
diablo de piel de ángel
eres la auténtica mentira.
(c) Alfonso Saborido 2009 amorsagrado.es